Así debes presentar la Renta 2020-2021 fuera de plazo para evitar un mayor golpe de Hacienda
- elEconomista.es
La Campaña de la Renta 2020-2021 ha tocado a su fin después de más de dos meses y medio en el que los contribuyentes han podido saldar sus cuentas pendientes con Hacienda. El pasado miércoles finalizó el plazo para la presentación de las declaraciones, pero lo cierto es que los más despistados, es decir, aquellos a los que se les haya olvidado hacerla, aún están a tiempo de salvarse de una multa de gran calado.
La clave estará en presentar la Renta, aunque fuera de plazo, pero siempre antes de que Hacienda nos envíe una carta de requerimiento. Eso disminuirá las posibles sanciones y nos evitará multas, dependiendo del caso en el que nos encontremos.
El caso menos grave es el de aquellos contribuyentes que entreguen la declaración fuera de plazo sin requerimiento de Hacienda y con resultado a devolver, que tendrán una multa de 100 euros. Si esperan a que la Agencia Tributaria les envíe una notificación para presentar la declaración, la multa es del doble, 200 euros.
La situación empeora cuando se trata de declaraciones con resultado a pagar, ya que este error perjudica a Hacienda. Si el contribuyente entrega la declaración de forma voluntaria, sin esperar a que la Agencia Tributaria le reclame, tendrá que hacer frente a recargos del 5% (para atrasos de tres meses máximo), del 10% (para atrasos de entre tres y seis meses), del 15% (para atrasos de entre seis y doce meses) y hasta del 20% si tarda más de un año en hacerlo. En este último caso, además, pagaría intereses de demora del 3,75% desde el comienzo de ese año de atraso.
El problema llega cuando el contribuyente no presenta la declaración y aparece una notificación de Hacienda exigiendo la regularización de su situación fiscal. En este caso, el organismo puede imponerle una multa de entre el 50% y el 150% de su deuda, lo cual dependerá del volumen de la propia deuda y de si el contribuyente es reincidente o no.
Conociendo las implicaciones de demorarse (aún más) en la entrega de la declaración, la opción más recomendable una vez estamos fuera de plazo es presentara cuanto antes para aminorar el golpe que Hacienda nos puede infligir después de nuestro olvido.
Cómo hay que hacer la declaración de la Renta
A la hora de ponerse manos a la obra con la declaración, el ciudadano debe tener claro qué métodos telemáticos tiene a su disposición para entregarla: se puede conseguir el borrador en la sede electrónica de la Agencia Tributaria con certificado electrónico (puede conseguirlo en cuatro pasos), Cl@ve PIN o el número de referencia a partir de la casilla 505 de la Renta pasada.
Ya con el borrador delante, debe tener en mente una serie de consejos:
-Revisar todos los datos: ha de consultar su información personal, su domicilio fiscal...para ver que todo sea correcto y, en caso contrario, modificarlo o completarlo.
-Atención a las deducciones: debe prestar muchísima atención a las reducciones y deducciones de carácter estatal y de ámbito autonómico, ya que pueden generarle importantes descuentos en la cantidad a pagar o incrementar el resultado a devolver en la declaración.
-Ojo si estuviste en un Erte en 2020 o si recibes el IMV: en el primer caso, será muy probable que tengas que hacer la declaración, ya que el SEPE cuenta como segundo pagador. En el segundo caso, debes entregarla la forma obligatoria, ya que es una condición indispensable para seguir percibiéndola.
