Red Hat muestra sus cartas en un escenario en el que "cada CIO es ahora un gestor de nube"

El modelo de negocio de código abierto por el que Red Hat lleva apostando desde sus inicios allá por 1993 sigue tan vigente como el primer día, incluso tras pasar a ser subsidiaria de IBM en 2019. Este modelo tuvo que competir con los de software “propietario” y cerrado que proliferaba en aquella época, recordó Paul Cormier, actual presidente y CEO de la compañía, quien hizo un completo recorrido por la historia del 'open source' en el evento (esta vez virtual) Red Hat Summit 2021.

"Nosotros estuvimos al lado del código abierto desde el principio, cuando nadie creía que era un modelo viable o un camino para desarrollar software comercial”, apuntó. En el momento actual, sucede lo contrario: el código abierto se identifica con innovación y se han dejado atrás tópicos como “lo barato sale caro” para favorecer la agilidad y versatilidad de este tipo de software. “Actualmente, todo el mundo ha abrazado el código abierto como la forma de solucionar problemas. No solo los programadores, sino también los gobiernos, la banca, instituciones, empresas y organizaciones científicas. De hecho, el 90% de los líderes mundiales afirman que están usando software empresarial de código abierto”, en palabras de Cormier.

Red Hat, de hecho, ha destacado por detectar las tendencias tecnológicas más relevantes de cada momento e integrarlas en sus productos y soluciones empresariales, ya sea mediante desarrollos in house o mediante la adquisición de aquellas tecnologías necesarias para completar el rompecabezas de sus soluciones empresariales. Entre sus últimas adquisiciones, por poner un ejemplo reciente, antes de pasar a ser subsidiaria de IBM, está Ansible, compañía especializada en las soluciones de automatización, que es, precisamente una de las tendencias más notables de los últimos años y cuya compra se anunció en 2015 convirtiéndose en la Red Hat Ansible Automation Platform.

Nube híbrida abierta y 'edge computing', la apuesta de Red Hat

Los directivos de Red Hat mostraron en las sesiones de apertura del evento “la foto” de la compañía en un momento en el que la computación en la nube está consolidada después de 10 años de adopción. Como recordó Cormier, cloud computing ya no es un obstáculo ni siquiera para sectores tan conservadores como la banca o incluso la Administración Pública, donde conviven las nubes públicas y privadas de un modo natural. “A pesar de lo que algunas empresas han dicho, no todo estará en la nube pública… algunas aplicaciones seguirán estando en centros de datos on-premise y algunas tendrán que trabajar sobre múltiples nubes”.

De hecho, el evento de este año está centrado precisamente en la nube abierta e híbrida y plantea de forma natural la extensión hacia la computación en el edge. Matt Hicks, vicepresidente ejecutivo de tecnologías y productos de Red Hat, describió los tres pilares sobre los que se sustentan los lanzamientos enmarcados en el Summit: “La expansión hacia el edge, la aceleración de las operaciones en la nube híbrida a gran escala y los nuevos servicios gestionados”.

La compañía anunció también que OpenShift se integra en las propuestas cloud de Amazon Web Services, Microsoft Azure y Google, sin olvidar la de IBM, al llevar Red Hat esta plataformaa las soluciones cloud de estas compañías. Red Hat OpenShift también está presente en propuestas de nube más “pequeñas”, desde luego, como la ejemplificada en una ponencia por Atos y su solución AMOS basada en OpenShift.

Paul Cormier dejó claro que “Red Hat seguiría trabajando conjuntamente con integradores de sistemas, vendedores independientes de software, OEM, distribuidores, canales de distribución y proveedores de soluciones IT”.

OpenShift, por otro lado, mantiene su filosofía basada en contenedores, orquestados bajo los auspicios de Kubernetes junto con la ayuda de servicios y aplicaciones cuando es necesario mantener la consistencia de las soluciones.

Ashesh Badani, vicepresidente senior de plataformas cloud de Red Hat.

En este evento se presentaron propuestas como Red Hat OpenShift Platform Plus, que se añade a Red Hat OpenShift Kubernetes Engine y Red Hat OpenShift Container Platform, añadiendo la dimensión de la “facilidad de gestión” y la consistencia junto a la seguridad. Esto está alineado con el eslogan de Red Hat “Every CIO is a 'cloud operator” (cada CIO es un gestor de la nube). Red Hat Insights es otra pieza del rompecabezas de las operaciones cloud. Sin olvidar Ansible y las soluciones de automatización.

Por su parte, Red Hat OpenShift API Management, Red Hat OpenShift Streams for Apache Kafka o Red Hat Open Shift Data Science son novedades enfocadas a facilitar el desarrollo de aplicaciones cloud.

En cuanto a seguridad, Red Hat adquirió la compañía especializada en seguridad para Kubernetes StackRox en enero de este año, que ya está integrada en el porfolio de soluciones de la compañía. Ashesh Badani, vicepresidente senior de plataformas cloud de Red Hat, dejó claro que al margen de esta adquisición la compañía seguirá trabajando con su "amplio ecosistema de partners en el campo de la seguridad. Este compromiso se mantiene”.

'Edge computing': el siguiente reto

Edge es la extensión narural de cloud computing. Más allá de ser una palabra “pegadiza” o comodín para designar aquello demasiado genérico como para aterrizarlo, es un espacio real y tangible que precisa de soluciones para acelerar el procesamiento de datos allí donde se capturan para habilitar servicios que de otro modo sería imposible desplegar.

Paul Cormier habló en su ponencia de la solución edge que ha sido llevada a la International Space Station: HPE Spaceborne Computing 2, para llevar potencia de computación allí donde se recopilan los datos en vez de depender de la capacidad de procesamiento en Tierra. Esa es la filosofía edge computing elevada a su máxima expresión.

A escala más “terrenal” la empresa presentó Red Hat Edge dentro de esta apuesta clara por edge computing. A su vez, Red Hat Enterprise Linux 8.4 integra nuevas funcionalidades para computación en el edge y también ha anunciado colaboración con empresas como Exida en el contexto del desarrollo de soluciones para el coche conectado, otro claro ejemplo de la tecnología edge.

El edge es el espacio entre los centros de datos y servidores core y la “última milla” y el usuario o la empresa. Y es un espacio que será poblado por soluciones edge computing a la medida de cada necesidad de procesamiento.

Otro acuerdo importante anunciado en el evento fue el formalizado con la Universidad de Boston, a la que Red Hat ha donado 570 millones de dólares en suscripciones de software para potenciar la innovación en proyectos de código abierto.

¿Y qué pasa con IBM?

El evento Red Hat Summit 2021 continúa hoy. De momento, el planteamiento está claro: nube híbrida abierta y edge computing manteniendo la filosofía open source. Red Hat se mantiene en un plano diferenciado frente a IBM como podemos ver. La relación con IBM es prácticamente la misma que tiene con otros partners manteniendo un fuerte compromiso con la neutralidad. Arvind Krishna, CEO de IBM, lo explicó perfectamente: “Red Hat trabaja con IBM pero eso en ningún caso da una ventaja a IBM frente a otras empresas”.

Arvind Krishna aprovechó también su intervención en el evento para dar algunas cifras sobre el trabajo conjunto con Red Hat en el campo de la nube híbrida: “Hemos llevado a más de 2.800 clientes a la plataforma. Cuando hablo de plataforma me refiero a Red Hat OpenShift y productos basados en Red Hat OpenShift”.